Ella contuvo la respiración y él se tragó el suspiro con otro beso. Su cuerpo se estremecía por la necesidad de desnudarla, follarla otra vez, de poseerla por completo. No era solo su cuerpo lo que quería, eso ya le pertenecía, quería su misma...
- Pero yo quiero que tú lo experimentes primero, pequeña Kisha. Quiero deleitarme en el rubor que se apodera de todo tu cuerpo cuando el orgasmo se precipita. Quiero ver el fulgor en tus ojos y oírte suplicar por más. Necesito que en tu linda cab...
Kisha se corrió y gritó su liberación echándose hacia atrás, y Kayen no pudo resistir la tentación de bajar la cabeza hasta sus pechos y succionar los pezones una y otra vez sin dejar de embestirla, desesperado. Un grito ronco le sacudió la ga...