—¿Me querrás siempre? —Siempre, Aura, te amaré para siempre. —¿Siempre? ¿Me lo juras? —Te lo juro. —¿Aunque envejezca? ¿Aunque pierda mi belleza? ¿Aunque tenga el pelo blanco? —Siempre, mi amor, siempre. —¿Aunque muera, Felipe?...